En la actualidad, es frecuente ser presa de la variación extrema del tiempo y en un mismo fin de semana disfrutar de cálidas temperaturas durante el día, con cielo totalmente despejado, y esa misma noche o al día siguiente disponer de chubasqueras o carpas para protegernos de lluvias y chaparrones, intermitentes o constantes, con importantes descensos de temperatura.
Estas condiciones han sido siempre una preocupación a la hora de realizar un paseo náutico, sobre todo para aquellos nautas que pasaron por la desafortunada experiencia de una tormenta.
Los pronósticos meteorológicos a mediano plazo (hasta tres días) difundidos por diferentes medios nos ayudarán a decidirnos por continuar con la preparación de nuestra travesía o desistir de la misma, aunque como dijimos al principio, la variación del estado del tiempo a corto plazo puede contrariar estas premisas. Mucho entonces se podrá aprender a predecir las condiciones de las próximas horas, solo observando la tendencia del barómetro, el viento y las nubes. Ejercicio que ya hemos realizado en las dos últimas notas: Sudestada y Pampero.
El tiempo se genera a través de la interactuación entre el Sol y la Tierra, formando centros de baja y alta presión que se desplazan alrededor del globo terráqueo. Los centros de BAJA (B) presión o Ciclónicos son los que reciben los vientos, giran en sentido horario en el hemisferio Sur y aumenta los niveles de presión a medida que nos alejemos.
Los centros de ALTA (A) presión o Anticlónicos son los que emiten viento y giran en sentido inverso a las agujas del reloj; a medida que nos alejemos de éste, la presión irá disminuyendo.
Los puntos de igual presión atmosférica trazan una trayectoria irregular que se conoce como Isobara, las que compiladas a una hora determinada se las denomina: carta meteorológica . En ellas se muestran: las isobaras cada 4 milibares, los Ciclónes (B), los Anticiclónes (A), los frentes de aire caliente (en rojo) y frío (en azul).
El Barómetro es un instrumento que mide la presión atmosférica expresada en pulgadas, milímetros de mercurio, milibares o hectoPascales, este último de uso actual y cuya equivalencia es la siguiente: 1013,25 hPa (considerada la presión atmosférica normal para la Pcia. de Buenos Aires) equivale a 1013,25 milibares o a 760 mm. de mercurio.
La presión no es fija, es relativa y va variando por el desplazamiento de los centros de presión. Si hacemos uso de la aguja de referencia (que en el caso del barómetro de la fotografía está posicionada en 730 mm.), podremos notar los cambios en un lapso de tiempo determinado y así preveer la llegada de una tormenta o viento fuerte, dependiendo de las condiciones meteorológicas previas. Como podemos observar, todo guarda estricta relación entre si.
Estimados colegas náuticos, dejaremos para la próxima los otros dos interesantes temas de este tríptico: nubes y viento, si Uds. nos lo permiten, aprovechando de esta manera una nueva excusa para reunirnos.
Tengan todos muy buena semana y "Vivan el paraiso... Naveguen por el Delta!"