martes, 16 de octubre de 2012

PELIGRO! VIAS DE AGUA

Hola amigos nautas. La lluvia nos obliga a realizar un forzado descanso del varadero y aprovechamos a escribir algo sobre el tema.
La presencia de agua a bordo de forma involuntaria, por poca que esta sea, siempre es una experiencia desagradable, y sin dramatizar, es el primer eslabón de una cadena de incidentes que pueden culminar con la pérdida del barco si no se le pone remedio.

Puntos vulnerables en
embarcaciones a motor
Prevención: Por eso, al comienzo de cada temporada, con el fin de prevenir, será conveniente efectuar una correcta inspección y si hiciese falta, el recambio de bombas de achique, abrazaderas, llaves de paso (de toma y descarga de agua), juntas, bridas, mangueras, correas, etc., sin olvidar una buena limpieza a fondo de la sentina. De esta manera y observando los principales puntos vulnerables a las vías de agua, Ud. tendrá por delante una temporada de navegación sin sobresaltos en relación a este tema.
Otra buena precaución consiste en disponer de un espiche (estaquilla que sirve para cerrar un agujero) atado y con un tramo de hilo encerado, ese mismo que se utiliza para falcacear, a las esclusas o pasa cascos. De esta manera evitará estar buscando algo para obturar el ingreso de agua en plena crisis.

Puntos vulnerables en
embarcaciones a vela

En aquella embarcaciones más antiguas o de mayor eslora, la bomba chupadora de agua para el motor suele tener un doble circuito que sirve como bomba de achique de gran caudal, controlar siempre las horas de servicio de los rotores de goma que estas poseen dentro puede ser vital al momento de necesitarlas.
Para aquellos capitanes que cuenten con prensaestopas (tradicionales o cerámicos) en las líneas de eje de sus embarcaciones, deberán ser consientes del mantenimiento que estos sistemas requieren.
Algo más, que aunque ridículo bien vale la pena mencionarlo: esmérese en que la sentina se encuentre siempre arranchada y todo elemento que pueda desplazarse, rodar o caerse esté perfectamente trincado. Cualquier objeto de cierto peso o volumen, ante un bandazo o fuertes cabeceos producidos por una tormenta inesperada, pueden dejar su lugar original de guarda para convertirse en un misil capaz de producir un rumbo o el descabezamiento de cualquier esclusa.

Para tener en cuenta: No ahorre dinero a la hora de instalar las bombas de achique y los automáticos. Tenga en cuenta que un orificio de 3/4" (20mm.) ó 1" (25mm.), siendo esta la medida de un pasacasco cualquiera, a unos 30 centímetro de profundidad, produce un ingreso de 42 a 55 litros de agua por minuto. Peor aún si se trata de un pasacasco destinado a la toma o desagüe del inodoro, en donde el mismo tiene un diámetro de orificio de 2" (50mm.) ó 3" (75mm.) y en las mismas condiciones del anterior este producirá una entrada de 300 a 500 litros de agua por minuto.
Por eso, cada embarcación deberá estar equipada con un sistema de bombeo en función de su eslora y tipo de navegación.

Cómo actuar ante el hecho consumado? Lo primero es evaluar la verdadera dimensión de la vía sin dramatizar, si advierte que el agua tiene cierta temperatura, el problema puede estar en alguna manguera del sistema de enfriamiento. De no ser así, será vital localizarla pudiendo servirnos de nuestro oído y el ruido que hará el agua al ingresar, al tiempo que evaluaremos nuestra capacidad de achique y el caudal que ingresa. Mientras tanto, asigne a algún tripulante que priorice mantener el motor en marcha en función de procurar carga a la/s batería/s para no dejar que caiga el rendimiento de las bombas de achique, si el saldo de la evaluación llegara a ser desfavorable, habría que considerar el abandono de la embarcación. Evite el pánico y procure taponar, detener o disminuir la entrada de agua con una reparación de fortuna como se muestra, a modo ilustrativo, en la imagen de la derecha. Si a pesar de todo somos incapaces de controlar la vía de agua y se encuentra cerca de una costa, vaya en busca de ella y embique la nave. Ganar flotabilidad será fundamental, para ello vacíe tanque de agua y arroje por la borda todo elemento pesado del cual pueda prescindir; otro recurso, en el caso de embarcación por debajo de los 30 pies, es inflar el bote auxiliar dentro de la camareta. Si todo esto no fuese suficiente, prepare a la tripulación con abrigo, linternas, bengalas, agua potable, botiquín y todo elemento que pueda asegurarles confianza, seguridad, tranquilidad y cierto bienestar. Modular varias llamadas de MAYDAY indicando: posición, nombre de la embarcación, número de tripulantes y situación. No abandonar la nave hasta último momento y trate de mantenerse en la zona del naufragio.

Como ya saben nuestra meta no es alarmar, exagerar o dramatizar. Convengamos que teniendo en claro como actuar en situaciones de riesgo hace que disminuya notablemente el grado de desaciertos provocados por el estrés del accidente. Esperamos haber sido claros, escuetos y didácticos en un tema tan serio, responsable y del que hay tanto para decir.
Como siempre nos despedimos de uds. deseándoles las mejores de las navegaciones! Hasta pronto!